miércoles, 31 de marzo de 2010


Descorazonada, por que no hay muerto en este luto, por que no hay cadáver en el ataúd, descorazonada, por que hace mucho que la fe se desapareció, que la noche no le dice nada, ni respira, ni late tampoco, por que hace mucho que sus labios se le perdieron en la multitud de la ciudad, en las magueyeras, en la nada, y nada queda, más que una mujer descorazonada, por voluntad propia, claro está, mucho más te falta, (con la calidad humana que tienes), para lograr arrancarle un pedazo del mismo corazón, del que te explico carece, si, es cierto, cuando al espejo contempla la dama desnuda, no encuentra más que signos, que ni ella misma sabe que significan, llega el, la besa, y le dice palabras dulces, palabras que se usan para enamorar, para enamorar, y dejar en éxtasis, para que luego venga la duda, la podrida y ancestral materia, de la que se compone la soledad, la espera impaciente, la duda quemada, la duda perpetua, pero ella, ella misma dentro de el espejo que la ha contemplado desde muy niña, sabe… que haga lo que haga, su pecho, ya no tiene, ni tendrá ese bum-bum, lo dejó en cualquiera arrabal, en cualquier faro de esquina, en cualquier cama, ella sabe que lo único con lo que la vida, puede ayudarle… es dejándola, sin rastro de miocardio.

Preñez


Tú…
hombre de hierbas,
soplaste aliento mágico
a mi vientre fecundo,
dibujaste en mi frente
un signo tibio que el tiempo no borrará.
Tus dulces trazos en mi alma,
serán el sustento que me quedará
por si acaso alguna noche me llenase de vacío,
y tus ojos no encontrara entre las montañas.
Tus manos a mi cuerpo dieran forma y estructura.
No pude escapar de tus dedos
que me conocen de extremo a extremo;
si no fui muy pura ni muy tierna,
casta o muy amable caballero,
se que también sabes la razón.
Ahora mi cuerpo late doble,
y en tus entrañas me contempla
un trozo de cielo que le robaste a dios de su reino
y colocaste en mis adentros…
Coronada por Venus robaré de la vía láctea
un poco de magia y nutrición
que será alimento de mis pechos,
para la criatura a la que daremos
forma y corazón,
este hijo de sombras marcadas,
fragancias, arrebato, música y misterio,
esta criatura;
tuya y mía.





Te pido que me compres este sueño que nada te cuesta, que por un momento no corrijas mis diéresis y no cuestiones mis puntos suspensivos, te pido que no recicles poesía robada de los baúles de mi abuela, (hecha para ella de mis tantos abuelos), antes que yo no te duermas, (desvelémonos juntos las noches que me quedan a tu lado).

febrero 14


Es cierto, ya tuve 14 de febrero con estrellas bajas, con rosas enmeladas, con chocolates amargos de medio día, 14 de febrero con camas llenas, con ventanas cerradas, con aires afables, con besos asfixiantes, y abrazos sin saber que decir, con inexplicables punzadas en las manos, con parestesias en cada rincón, en cada oquedad de las paginas abiertas de una historia de Giardinelli, ya tuve 14 de febrero con abrigos embriagantes, con sábanas de seda, también arrugadas, pero aún tibias, (el hálito que los amantes anteriores dejaron en esa habitación de hotel de paso), ya tuve 14 de febrero con arte en las paredes escurridas por el tiempo, y el calor que ha botado la decoración interior, febreros con barro húmedo en la mitad de los cuerpos naufragados.
Es cierto, que a este ramaje de mitades de melocotones, nada más que sed puedo pedirles, que me den sed, que me den sed para sentirla, que me escupan con esa soledad que solo jode a los que no saben amar, que he sabido amar, y abdicar al trono que me pertenece por garantía de tus labios, no me hace daño ver pasar a los antagónicos de la mierda humana, con helados, y regalando poesías que me compran en los cruceros de la sobriedad y la locura, en las grandes avenidas de los pasos vagabundos que nunca encontraran donde sestear , no me hace daño no verte hoy, tampoco mañana…
Ya tuve 14 de febrero, mientras Afrodita, me tallaba los ojos con sus pezones tibios e inexorables.

La cicatriz de Marilyn Monroe





Voy a besar tu costado, voy a lamerte la cicatriz que te dejó el tsunami que despeinó tu cabellera, voy a soñar que eres humana, voy a soñar por un segundo que tu vesícula me redime el llanto que tengo desde tu partida, voy a engañarme el hambre con tus arterias dilatadas, voy a rendirle penitencia a tu pezón derecho, les rezaré a tus 36 y les pediré que Norma
te llamen, que por Norma te acoja el universo, pediré clemencia a Venus, para que cuando te contemple miedo de la ceguera no tenga -tus rayos rebasan la razón humana-, tu piel es la leche de las mariposas, la que cargan en los labios, ¡Bendito sea el centro del universo! Que casi besa tu labio superior, la imperfección buscabas, pero siempre se ocultó de ti, regaré la alcoba con Dom Pérignon, será justo… el último día, me voy a crucificar con tus pestañas, ante tu insoportable belleza.

martes, 30 de marzo de 2010

El sueño fue una verdadera epifanía, si mi matriz menuda y cansada no puede tener una hija más, pues lo que queda es que ese ser sea concebido y parido por vos. ¿Imposible? Y no, no puedo creer que en ese cuerpo tan pródigo en espacio no haya lugar para albergar a una pequeña o a dos, puestos en peticiones, mejor unas gemelas que una nena. Podríamos buscar un lugar cercano a tu columna vertebral, o tal vez sería mejor que aniden en tu hemisferio izquierdo; así el parto sería más sencillo. Me bastaría con partirte la cabeza para que surgieran nuestras niñas como modernas Ateneas. Lo único que tendríamos que cuidar es que al momento de nacer no pisaran tu delicado tejido cerebral.

En éste sueño, me veía esperándote surgir de la tierra. Con la ilusión de un oso volador en mi corazón, no perdía la esperanza de que aparecieras al terminar la noche, con ese lindo sombrero gris y tus botas verdes, viejas y rotas. Al verte corría, trepaba hasta tus labios y después de un dulce beso te decía quedo al oído- Buen día cielo, me siento con ganas de hacerte una niña sin más tardar.

Abriendo esos hermosos ojos castaños preguntaste -¿Tú a mí?

-¿Y porqué no? Apuesto un fin de semana en mí casa a que serías el mejor padremadre del mundo. Además, ¿no crees que unas niñas tan especiales como Carlota y Zoey deberían tener una concepción única en la historia de la humanidad?

Aceptabas que mi lógica era contundente y sin más, comenzábamos la aventura.

Desafortunadamente, en ese momento las ranas que habitan mi cabeza comenzaron a croar de un modo infernal que no tuve más remedio que despertarme. Ojala esas malditas alimañas hubieran tenido rotas las cuerdas vocales, al menos por unas horas, así te podría decir si logré preñarte en sueños o no.


José Luis Ortiz Camargo de las letras y Carolina.
VersOs B&N






Nombres femeninos...


La Explicación está en tu cadera Mariela, porque la sustancia activa del Big Bang se encuentra ilustrada en su cadencia Clemencia, eres el motor inmóvil que causa el parpadeo, eres la causa el principio, el fin, y la justificación de todo acto Celeste, ¡sigue bailando en mis confines! Baila en mis meridianos, socávame los polos para morir en blando, llévate la melancolía María, que se me está haciendo hábito buscarla, ¡dame el bebedizo! ¡usa el artificio te digo!, que me inundo si no encuentro espacio para llenar de lluvia tus canales Ángeles, vida y muerte patentaré tus labios a mi nombre, ya me conoces, sabes que no comparto musa.
Jesusa no te creas tan importante, Isadora a todas las adora, este pedazo –extensión de sus existencias maquiavélicas- después de todo; todas son una y ninguna es de todas.

Virgen de la Amargura

Bendigo la condena,
al sólo de tu bordón que me hace fuerte
y beso tus cadenas
y quiero prometerte
ser libres como dos versos tachados
del dictado de la revolución.

Me acuso de morirte sin tu boca,
confieso que desde que te has
marchado
solo bailo en las fiestas donde tocan
la musica del vals de los ahorcados.



Diálogos




Vamos, dejémonos de protocolos Briendarela, ambos sabemos que cuando me coges, no recitas poesía (aunque afirmes que en mi carne), cuéntales a tus lectores que no eres un gran escritor, pero si un amante de locura.
El pornosilábico canta en la ducha, yo le espero; nunca le había oído cantar, -¿Qué te comes?-, -Tus pezones nena, que me hacen cerrar los ojos, porque tus tetas me nublan la vista-, -acércate, y ponte el sombrero azul, es el que más me gusta porque te hace ver como gente importante- -¡Estás loca pornosilábica!- , te he secado tanto que tus neuronas ya comienzan a morir como peces sin agua de río, -Eres un ególatra del sombrero aún te queda mucho por hacer para lograr secarme; pero dime algo más, ¿Alguien a parte de los vecinos sabe que los lunes no me penetras? Y que prefieres solo esperar a que me duerma para jugar con mis pies (que sospecho te gustan más que mi culo), ¿Es que creías que no me iba a dar cuenta? –Esa es la magia bebé, nunca rebeles que notas cuando te ultrajo, nunca rebeles mis miles de fetiches-.
¡Eres un maricón! Dice la pornosilábica, -¡Dímelo más fuerte! -¡Grítame más fuerte carajo!, necesito corroborar mi hipótesis de que te puedes venir de cuatro a cinco veces en el mismo ataque, perdías el tiempo mi cielo, antes de conocerme no eras más que una gatita con sed, una gatita floja que no era capaz ni de levantar su plato terminando de comer, ¡Eras un desperdicio de hembra!- concluye Briendarela.
-Baaaah, ya te estás poniendo romántico cariño, y no sabes cuanto me molesta eso, porque después quieres leerme poesía, ¡o hasta el diario! Cuando me disciernes las piernas ¿Me haces un cafecito?- , -bueno-, responde el del sombrero; antes aclárame algo, ¡shh! Le cierra la boca ella, mientras lo toma bajo suyo.



“…La poesía, es nuestra casa, con puertas anchas, con pasillos recónditos, muy recorridos antes de nuestra llegada, la poesía nos inyecta vida, nos alimenta con verso, nos restriega su cuerpo bidimensional, unidimensional, su cuerpo terso… ese cuerpo que si se besa entre llantos y vino barato, entre sonidos de la calle, y gemidos (plenilunios invernales), se queda en el alma como una maldición perpetua, y por más que trates de escapar de sus fauces, ella no te deja dar un solo paso, como la hiedra; se extiende a lo largo y ancho del cuerpo…”
Shhh mi amor, dame, dame hasta que ya no pueda, tápame la boca


que voy a gritar, ¿sientes?, si, si… ah, ah, ¡ah!, no exageres, ¡cállate puta madre!, lléname, dame más, más, ándale, ándale, ahí estás bien, ahora muévete, dale, dale, ¡fuck!, por el culo de la virgen , pero que buena eres pornosilábica, oh, oh, ¡oh!, ¿A quién te cogiste anoche?, al demonio y a dios que me daba por la boca, ¡jajajaja…! –pinche blasfema carajo-, ¡ya deja de hablar que este diálogo lo inicié callándote!, además no tienes otro templo de oración que no sea mi pubis, y no comulgas con nadie más que mis nalgas, ¡oh, ohhhh!, ¿sientes como me vengo? ¡Sí! Qué caliente está.

Alma, Alma de mi alma, alma ingrávida, doliente sensación en estos días de estrecho andar, alma etérea, sueño seco, reseco, húmedo y poco constante. Alma, me quitaste al que amaba, te entregó lo que a mi alma le faltó para supurar el óxido implantado por los constantes pliegues mal pegados, alma impura, que caminaste fatigada para llegar a el, como yo solía hacerlo, alma ya no me dueles, ni te culpo tampoco por ser la bestia que se tragó a la mariposa que yo buscaba, ya no te invoco en horas envinadas, en que me da por blasfemarle a la existencia misma…
Alma, alma morada e histérica, no te culpo por amarlo, que si en esta tierra la que no se homogeniza no lo ama, no es digna de llamarse, Alma.

lunes, 29 de marzo de 2010

Lunas


Hoy la luna amaneció culeca
dispuesta a enamorar pieles furtivas,
a entoloachar corazones de jade.